Uruapan, Michoacán. – La violencia volvió a golpear el corazón de Michoacán. La noche del 1 de noviembre, el presidente municipal Carlos Alberto Manzo Rodríguez, alcalde independiente de Uruapan, fue asesinado a balazos durante la inauguración del Festival de las Velas, una de las celebraciones más emblemáticas del municipio.
El ataque ocurrió en pleno centro histórico, frente a decenas de familias que participaban en los festejos por el Día de Muertos. De acuerdo con el Gobierno del Estado, dos presuntos agresores fueron detenidos y uno más abatido durante la persecución inmediata.
Manzo Rodríguez, de 40 años, era reconocido por su discurso frontal contra la delincuencia organizada y por su gestión sin partido político, siendo el primer alcalde electo de forma independiente en la historia de Uruapan.
Durante su gestión, Carlos Manzo se distinguió por encabezar operativos municipales y exigir públicamente la intervención del Gobierno Federal ante la creciente presencia del crimen organizado sin obtener una respuesta activa.
En múltiples entrevistas, había advertido sobre el riesgo que enfrentaban las autoridades locales ante el control de grupos armados en la región. En mayo pasado, se viralizó una de sus declaraciones más contundentes:
“A los delincuentes no se les abraza, se les enfrenta. Uruapan necesita autoridad con carácter, no discursos vacíos.”
Su postura lo colocó bajo los reflectores nacionales y también lo convirtió en blanco de amenazas.
El Gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, condenó el crimen a través de redes sociales, asegurando que las fuerzas estatales y federales ya colaboran con la Fiscalía General del Estado en la investigación.
“El asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, es un atentado contra las instituciones democráticas y la paz de Michoacán. No habrá impunidad”, publicó el mandatario estatal.
El Gabinete de Seguridad Federal también informó sobre la detención de los presuntos responsables y el refuerzo de vigilancia en la zona.
Carlos Manzo Rodríguez fue diputado federal del Distrito 9 de Michoacán antes de postularse por la vía independiente a la presidencia municipal, la cual asumió el 1 de septiembre de 2024. Desde su llegada, impulsó políticas de transparencia y cercanía ciudadana.
Su administración fue reconocida por la recuperación de espacios públicos, pero también marcada por la falta de recursos federales para fortalecer la seguridad. En sus últimos pronunciamientos, lamentó la escasa coordinación con instancias federales y alertó sobre el riesgo de “una tragedia anunciada” si no se atendía la crisis de violencia.
Uruapan es uno de los municipios más golpeados por la disputa entre grupos del crimen organizado en Michoacán. De acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, la entidad registra uno de los índices de homicidios más altos del país.
El asesinato de Carlos Manzo se suma a la lista de ataques contra autoridades municipales en México, un reflejo de los riesgos que enfrentan los gobiernos locales al intentar recuperar el control territorial.
Según informes de medios locales y ciudadanos de la localidad, las autoridades mantienen resguardada la zona donde ocurrió el ataque y han desplegado un operativo conjunto con la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano. Hasta el momento, no se ha revelado el móvil del crimen, aunque la línea principal apunta a su postura firme contra la delincuencia.
El cuerpo del alcalde fue trasladado al Servicio Médico Forense de Uruapan. En las próximas horas se espera un pronunciamiento oficial de la Fiscalía de Michoacán sobre los avances del caso.
